domingo, junio 03, 2007

Un pequeño pedazo de finalidad...

Las palabras quedan cortas: el corazón henchido de felicidad; la felicidad que deja el final... Suena la música y ese mismo corazón no deja de bailar, el saberse querido siendo un paria... El corazon duele por esa misma felicidad y resuena una y otra vez; la finalidad deja de ser solo hoy una amarga compañera.

Las palabras me abandonan en las ultimas horas de la noche y el corazon es ahora la fruta madura que explota y deja las semillas de fuera, como mil ojos sin parpados que no ven y solo sienten...

Finalidad

El corazon sigue henchido de felicidad y aun no puedo explicarme esta sensación. Las calles del centro sin lluvia no dejan de ser romanticas: los caminos libres de trafico, los comercios cerrados esperando el nuevo dia y yo, solo un rey/expectador/poeta de mente fugaz... no puedo mas que sonreir y esperar que las lagrimas emanen sin compromiso, libres al fin por el ciclo que se cierra....

Llego a las 4 am y el tiempo se detiene mientras espero con ansias el futuro amanecer que promete un nuevo nombre a voces calladas: un regalo y una condena.

¡Como te extraño tiempo! y esta vez, no quiero que te detengas.

¡Cuantas cosas se pierden en un instante y cuán pocas se ganan en la eternidad! No te detengas corazon, sigue henchido de felicidad, hasta que explotes y mi memoria se pueda elevar en una ultima noche forzada -por quien escribe- de una luna azul.

Dias de felicidad: El adios, y la bienvenida al amigo... El paramo blanco de la incertidumbre...

Solo se que quisiera explotar... convertirme en millones de particulas de finalidad, cuya densidad sea menor que la del aire...